[1][7][8][9] La RASD no aprueba la explotación de los recursos naturales del Sahara Occidental por su estatus político.
El buen estado económico, urbanístico, cultural y social de las ciudades saharianas es una realidad hoy en día en el Sahara occidental.
[11] Según el economista Marroquí Fouad Abdelmoumni: «El coste del conflicto, es simplemente el desarrollo de Marruecos».
Fouad Abdelmoumni estima que «sin el Sáhara, Marruecos habría estado en la media mundial y gastaría anualmente para su ejército el 1,90% de su PIB».
Existen exenciones fiscales y aduaneras así como condiciones preferentes de financiación para incentivar las inversiones en el Sahara Occidental, especialmente en El Aaiún.