Se quiere luchar contra la propagación de la influencia soviética y, sobre todo, del comunismo en Europa Occidental.
[1]El gobierno británico había notificado a la Casa Blanca que no podía continuar apoyando al gobierno griego contra las guerrillas comunistas ni podían ayudar económicamente a Turquía.
[2] La doctrina se promulgó específicamente con el ánimo de proporcionar soporte intervencionista a gobiernos que resistían frente al comunismo.
Truman insistió en que si Grecia y Turquía no recibían la ayuda que necesitaban, podían caer inevitablemente en el comunismo, siendo el resultado un efecto dominó de aceptación del comunismo en la región.
Los norteamericanos comenzaron a instalar bases militares en Grecia y Turquía, aumentando así el número de soldados en Europa Occidental.