Disturbios de Niká

Tomó su nombre del grito lanzado por los rebeldes: «Nika», que significa «¡vence!» en griego.Los acontecimientos tuvieron lugar en los alrededores de la residencia del emperador Justiniano I.El momento político también era turbulento, pues Justiniano estaba en medio de una negociación con los persas por la paz, y para pagar a estos y a otros bárbaros debió establecer amplios impuestos a la ciudadanía, que no fueron bien recibidos.La revuelta comenzó en el Hipódromo, donde se encontraban los emperadores, y se fue extendiendo por toda la ciudad, atacando y destruyendo edificios públicos como el Gran Palacio y la iglesia más importante de la ciudad, Santa Sofía, que más tarde sería reconstruida por Justiniano.Solo la serenidad de su esposa, Teodora, impidió que Justiniano huyera de la capital y permitió que la rebelión fuera finalmente sofocada por el general Belisario.
Plano de Constantinopla con el Hipódromo y el Palacio.