Distrito de San Juan del Oro

Buscando esta leyenda llegaría a enterarse de que al Sur-Oeste del Cusco existían unas minas que habrían sido la fuente de la mayor parte del oro para las piezas del Coricancha, o templo del sol en esa ciudad; esplendor muy familiar para ellos, a causa del cuarto lleno de oro por el rescate de Atahualpa acumulado en Cajamarca, poco después de la incursión española en suelos peruanos.Se dispondría a buscar El Dorado, siguiendo el viejo camino de los Kallawayas, llegaría hasta las minas de Lak'aya, Corani, probablemente Ananea y alguno que otro centro aurífero inca en las primeras estribaciones selváticas del territorio que era conocido como Hatun Kallawaya: ninguno de esos centros auríferos correspondería a sus expectativas.Siguiendo su angurria, se encaminaría a buscar El Dorado adentrándose en la Selva hasta llegar a un lugar en el que, en efecto, encontraría generosas pepitas de oro, probablemente algún 24 de junio antes de 1540.Su hallazgo le haría fundar allí su villa San Juan del Oro.A partir de 1542, se empezaron a recibir remesas cuyo origen eran las más antiguas minas de oro conocidas en el Perú, las de la región Carabaya o Kallawaya [en esos tiempos]; para proveer esos primeros embarques hacia España, a los antiguos centros auríferos incas arriba mencionados, que tienen aún vestigios de haber sido explotados intensamente por los españoles, se sumaría ya el oro que surtía el primer centro aurífero de fundación española en Hatun Kallawaya, región aurífera por excelencia, el de esta villa ubicada primigeniamente en alguna de las quebradas cercanas a la cuenca en que se halla actualmente el pueblo de San Juan del Oro.