La separación angular es una magnitud fundamental en Astronomía para determinar la posición de cualquier objeto en la esfera celeste mediante sus coordenadas celestes, ya sea en unidades angulares, o de tiempo.
El acimut, la altura, la declinación, o la ascensión recta de un objeto del firmamento son, entre otras, coordenadas celestes.
Cualquiera de ellas es una distancia angular a un punto o un plano de referencia: el horizonte, el ecuador celeste, el meridiano sur, etc.
Esta expresión está deducida de la Trigonometría esférica básica y es por lo tanto aplicable no solo a las posiciones de objetos en la esfera celeste dadas por la ascensión recta y la declinación, sino también a las definidas por cualquier otro par de círculos máximos ortogonales tomados como referencia de ángulos, por lo tanto podemos usar la misma expresión para, por ejemplo: Para observaciones visuales sin pretensiones de exactitud, la separación angular también es muy útil, claro que con aproximaciones del orden del grado, y por supuesto que muy grosso modo.
La mano y los dedos son el instrumento de medida, manteniendo el brazo extendido: Las variaciones individuales -longitud del brazo, grosor de los dedos, etc.- hacen de los valores anteriores unas primeras aproximaciones, pero no por ello menos válidas para localizar a simple vista alguna estrella o planeta, o bien relacionar una constelación con sus vecinas.