Diofanto acuñó el término παρισότης (parisotes) para referirse a una igualdad aproximada.
[2] Este término se tradujo como "adaequalitas" en latín, y se convirtió en la técnica de adecuación desarrollada por Pierre de Fermat para encontrar máximos para funciones y líneas tangentes a curvas.
Finalmente, en 1994, Andrew Wiles encontró una prueba después de trabajar en ella durante siete años.
Fermat no fue el primer matemático que se sintió impulsado a escribir sus propias notas marginales en un libro de Diofanto; el erudito bizantino Juan Cortasmeno (1370-1437) había escrito "Tu alma, Diofanto, esté con Satanás debido a la dificultad de tus otros teoremas y particularmente del presente teorema" junto al mismo problema.
[8] Diofanto escribió otros libros además de Arithmetica, pero sólo se conservan unos pocos.
El propio Diofanto se refiere a una obra que consiste en una colección de lemas llamada Los Porismos (o Porismata), pero este libro se ha perdido por completo.
Ha sido estudiado recientemente por el historiador de matemáticas Wilbur Knorr (1945-1997), quien sugirió que la atribución a Herón es incorrecta, y que el verdadero autor es Diofanto.
[11] En la actualidad, el análisis diofantino es el área de estudio en la que se buscan soluciones enteras —de números enteros— para las ecuaciones, y las ecuaciones diofantinas son ecuaciones polinómicas con coeficientes enteros para las que sólo se buscan soluciones enteras.
Dado que también se emplea una abreviatura para la palabra "igual", Diofanto dio un paso fundamental desde el álgebra verbal hacia el álgebra simbólica.Aunque Diofanto realizó importantes avances en el simbolismo, aún carecía de la notación necesaria para expresar métodos más generales.
Al álgebra le quedaba aún mucho camino por recorrer antes de poder escribir y resolver sucintamente problemas muy generales.
Las ediciones de Arithmetica ejercieron una profunda influencia en el desarrollo del álgebra en Europa a finales del siglo XVI y durante los siglos XVII y XVIII.
El matemático del siglo XIX Hermann Hankel, en su Historia de las matemáticas, valoró así su figura: «Diofanto es el padre de la aritmética y del álgebra en el sentido con que practicamos estas ciencias; fue el primero que operó, es decir, que calculó sin ninguna representación geométrica, manejando expresiones numéricas de tipo general las leyes formales determinadas de la suma, resta, multiplicación, división, elevación a potencias y extracción de raíces».