Le Reglamento de Servicios Digitales (DSA)[1] es un Reglamento establecido para modernizar la Directiva sobre el comercio electrónico en lo referente a los contenidos ilegales, la publicidad transparente y la desinformación en la Unión Europea.
[9] Esto marca el paso final para que DSA cobre vida.
Al hacerlo, la DSA tiene como objetivo armonizar diferentes leyes nacionales en la Unión Europea que han surgido a nivel nacional para abordar el contenido ilegal.
[2] La más destacada de estas leyes ha sido la NetzDG alemana, y leyes similares en Austria ("Kommunikationsplattformen-Gesetz") y Francia ("Loi Avia", declarada inconstitucional por el Consejo Constitucional).
[11] En la práctica, esto supondrá una nueva legislación en materia de contenidos ilegales, publicidad transparente y desinformación.
La propuesta de DSA mantiene la regla actual según la cual las empresas que alojan datos de otros no son responsables del contenido a menos que realmente sepan que es ilegal y, al obtener dicho conocimiento, no actúen para eliminarlo.
Además de las exenciones de responsabilidad, la DSA introduciría un amplio conjunto de nuevas obligaciones en las plataformas, incluidas algunas que apuntan a revelar a los reguladores cómo funcionan sus algoritmos, mientras que otras obligaciones crearían transparencia sobre cómo se toman las decisiones para eliminar contenido y en la forma en que los anunciantes se dirigen a los usuarios.
También deberán, en caso de haber ofrecido un producto o servicio ilegal, informar a los consumidores y facilitarles la identidad del comerciante y cualquier vía de reclamación adecuada.
Sin embargo, va más allá al abordar temas como la desinformación y otros riesgos, especialmente en plataformas en línea muy grandes.
[31] Esto establece un marco legal para los espacios de datos comunes en Europa que aumentará el intercambio de datos en sectores como las finanzas, la salud y el medio ambiente.
[31][32] Con Rusia utilizando las plataformas de redes sociales para difundir información errónea sobre la invasión rusa de Ucrania en 2022, los legisladores europeos sintieron una mayor urgencia de hacer avanzar la legislación para garantizar que las principales plataformas tecnológicas fueran transparentes y estuvieran debidamente reguladas, según The Washington Post .
[38][39] Los académicos han comenzado a examinar críticamente la Ley de Servicios Digitales.
[44] Human Rights Watch, por su parte, acogió con satisfacción la transparencia y los recursos para los usuarios, pero solicitó que se ponga fin a la vigilancia y la elaboración de perfiles abusivos.
Para la eurodiputada sueca Jessica Stegrud en su argumentación afirmó que el enfoque dado a la DSA para prevenir la propagación de desinformación y "contenido dañino" socavará la libertad de expresión.