Diego de Cubillas (1538-1575) fue un maestro cantero cántabro, natural de Matienzo, en el Valle de Ruesga.
[3] El origen común de ambos canteros y su vinculación profesional permiten suponer la existencia de un parentesco cercano.
Ese mismo año, comenzó a trabajar a las órdenes de Rodrigo Gil de Hontañón en la Iglesia de San Cipriano de Fontiveros (Ávila).
El abono de estos trabajos se prolongó hasta mucho después de su muerte, siendo cobrados por su yerno y heredero, el cantero Lope de Matienzo, hermano de Juan de Matienzo.
[6] Entre las obras en las que participó, se encuentran las que se enumeran a continuación: