[4][3] Posteriormente regresó a Nicaragua y se estableció en Granada.
Tuvo un serio disgusto con Domingo Cabello y Robles, gobernador de Nicaragua, que se negó a reconocerle los honores y privilegios procesales correspondientes a su título.
[5] Se casó con Manuela Chamorro,[2] con quien no tendría descendencia[2] pero según algunos autores de diversas épocas,[6][7][8] quien participara en las revoluciones del siglo XIX[6] era su hijo homónimo,[6][7][8] VIII adelantado de Costa Rica,[6][7][8] título reconocido por el rey[8] el 14 de noviembre[6][7][8] de 1804.
[6][7][8] Intervino en los acontecimientos revolucionarios de Nicaragua en 1811-1812,[6][8] al lado de los insurgentes, motivo por el cual se le sometió a juicio junto con otros pioneros de la independencia de ese país y se le desterró.
Sin embargo, en 1823 una ley emitida por la Asamblea Constituyente de las Provincias Unidas del Centro de América dispuso abolir todas las dignidades nobiliarias y el título se extinguió.