A Santiago llegaron a visitarle los reyes Camaquiri y Cocorí, que le obsequiaron objetos de oro bajo.
Poco después hizo venir ante sí a los reyes Camaquiri y Cocorí, los apresó y les exigió un cuantioso rescate en oro.
Sin embargo, casi enseguida Camaquiri logró fugarse, y Cocorí manifestó a Gutiérrez que carecía de riquezas.
El gobernador entonces le sometió a servidumbre, por lo cual, ante tales abusos —según relató el milanés Jerónimo Benzoni— los reyes de Suerre y Cuyupa, que al principio habían recibido amigablemente a Gutiérrez, "quemaron las casas talaron los frutos y árboles, se llevaron el grano de las labranzas, destruyeron el país y luego se retiraron al monte".
En el paraje denominado Tayutic, entre los actuales pueblos de Tuís y Chirripó, los expedicionarios, que habían sufrido hambre y otras privaciones, fueron atacados en diciembre de 1544 por un numeroso grupo de indígenas, que dieron muerte al gobernador y a la mitad de los cuarenta hombres que le acompañaban.