No obstante, sus antepasados más cercanos habían sido reyes de Uí Cheinnselaig, entre ellos su bisabuelo Domnall mac Cellaig (fallecido en 974).
Los reyes de Leinster se encontraban en una posición particularmente ventajosa para explotar estos núcleos, ya que tres de las cinco principales centros vikingos se encontraban en su provincia.
Y finalmente, Dublín, el más importante centro vikingo en la isla, situado en el noreste de la provincia.
[4] Esta política se reveló altamente rentable para los intereses de Leinster, que consiguió atraer a su órbita el reino vikingo de Dublín, sustrayéndolo a la influencia del Rey Supremo.
De hecho, cuanto los ejércitos sajones fueron derrotados por los normandos en la batalla de Hastings, los hijos del rey sajón Harold Godwinson, fallecido en la batalla, huyeron a Irlanda, donde fueron acogidos por Diarmait, que les alquiló su flota dublinesa para intentar invadir Inglaterra.