La diócesis tiene 26 000 km² y extiende su jurisdicción sobre los fieles católicos de rito latino residentes en la provincia del Cabo Oriental en los distritos de: Queenstown, Cathcart, Stutterheim, Tarka, Hofmeyr, Glen Grey, Stockenström, Maraisburg, St Mark's, Tsomo, Ngqamakhwe, Butterworth, Dutywa, Centane y Willowvale.
Sin embargo, el vicariato apostólico del Cabo de Buena Esperanza, Distrito Oriental, dirigido por el irlandés Hugh McSherry, recibió con desconfianza a los nuevos misioneros y exigió que su actividad se limitara a los no europeos.
La erección de una misión sui iuris independiente reconoció a los palotinos la libertad misionera efectiva.
Para hacer frente a los gastos del funeral del primer superior de la misión Franz Josef Vogel, que murió de un infarto provocado por el estrés, los palotinos se vieron obligados a contratar una hipoteca.
Con Johannes Baptista Rosenthal se inició un proyecto sistemático que dotó a este distrito eclesiástico de estructuras parroquiales y escolares.