Diócesis de Chisináu

Está inmediatamente sujeta a la Santa Sede.La diócesis comprende toda Moldavia, incluyendo el estado autoproclamado independiente de Transnistria.La sede episcopal está en la ciudad de Chisináu, en donde se encuentra la catedral de la Divina Providencia.Al final de la Segunda Guerra Mundial, con el paso de Besarabia a la Unión Soviética, las parroquias latinas fueron entregadas en administración a los arzobispos de Riga.[4]​ El 27 de octubre de 2001 la administración apostólica fue elevada a diócesis con la bula Sollicitus de spirituali del papa Juan Pablo II, tomando su nombre actual.