Dedición
La dedición (en latín, deditio) era la fórmula aplicada a las ciudades enfrentadas a la República romana que eran sometidas por la fuerza y consistía en la rendición incondicional[1] y su posterior conversión en ciudad dediticia, siempre y cuando el desenlace no fuera la destrucción total de la ciudad vencida.Además la ciudad debía permitir en su recinto el establecimiento de una guarnición romana.En la Lusitania había cinco colonias, cuatro municipios y 37 ciudades estipendarias.La ciudad dediticia quedaba privada de todo derecho jurídico para sus habitantes, lo que la colocaba en el último escalón de la ordenación municipal romana que estaba configurada con las colonias romanas en lo más alto del estatus jurídico, a las que seguían los municipios romanos, y después las ciudades peregrinas o extranjeras.En ocasiones los habitantes optaron por el suicidio antes de ser capturados y vendidos como esclavos, como en Numancia.