Damián de Molokai

[5]​ En 1863, su hermano Augusto, quien había sido destinado a la misión en las islas Hawái, fue afectado por el tifus, lo que le imposibilitó viajar.

Trabajó en varias parroquias en la isla de Oʻahu en una época en que el reino sufría una crisis sanitaria.

Temeroso de que se esparciera la plaga, el rey Kamehameha IV segregó a los leprosos del reino, trasladándolos a una colonia establecida para ellos en el Norte, en la isla de Molokaʻi.

La Royal Board of Health los proveyó con suministros y comida, pero no tenían todavía los medios apropiados para ayudarles médicamente.

La primera misión que se impuso Damián fue construir una iglesia y establecer una parroquia consagrada a santa Filomena.

Los sociólogos argumentaron ante la Curia Romana, en el procedimiento para su santidad, que Damián fue enviado a una “colonia de la muerte” donde la gente se veía forzada a pelear unos contra otros para lograr sobrevivir.

Cuando su hermana y heredera, la princesa Lydia Liliʻuokalani, visitó el establecimiento para entregar la condecoración, las crónicas reflejan que se conmovió de tal manera, y sintió como si se le rompiera el corazón, que le resultó imposible leer su discurso.

La princesa compartió esta experiencia con el mundo aclamando los esfuerzos del Padre Damián.

A pesar del descubrimiento, los residentes señalan que el Padre trabajó incansable construyendo cuantas casas pudo y planificó la continuación del programa que había creado para cuando él se hubiera ido.

Su restos mortales fueron trasladados en 1936 a Bélgica y reposan en la Iglesia de la Congregación en Lovaina.

Cuando, en 1959, Hawái se convirtió en el estado número 50 de los Estados Unidos, los representantes del pueblo hawaiano escogieron a Damián para que su estatua los representara en el Capitolio de Washington.

[6]​ Esta carta abierta sentó las bases de su fama internacional en el mundo angloparlante.

León Tolstói hizo referencia a «las hazañas del Padre Damián» en su libro El reino de Dios está en vosotros, como parte de su extensa argumentación para enfatizar «la contradicción entre nuestra vida y nuestra conciencia cristiana».

Casa donde nació.
Fotografía de Damián de Veuster en 1878
El padre Damián, con las niñas del coro de Kalawao en la década de 1870.
El padre Damián de Veuster en diciembre de 1888, óleo de Edward Clifford.
Damián de Molokai en su lecho de muerte, fotografiado el 14 de abril de 1889, un día antes de su fallecimiento.
Desde el 4 de enero de 1995, la figura del padre Damián de Molokai acompaña como imagen paraheráldica al escudo propiamente dicho de Tremelo , el municipio belga donde nació. [ 11 ]