Cristoforo Numai
Diez años después fue elegido vicario de la orden en la misma provincia eclesiástica; en 1512 se trasladó a Roma como comisario de la orden ante la Curia, y al año siguiente fue nombrado vicario general de los observantes en Italia.En 1517 el papa León X convocó un capítulo general de los franciscanos para poner fin a las diferencias internas existentes en la orden, que estaba dividida en observantes y conventuales desde los tiempos de Eugenio IV; el papa sentenció la separación definitiva de ambas ramas, y Numai fue nombrado Ministro general de los observantes.En 1518 viajó a Francia para asistir al capítulo general celebrado en Lyon, donde cedió el generalato de la orden a Francesco Licheto, y también para convencer a Francisco I de participar en una gran cruzada internacional contra los otomanos que amenazaban el Mediterráneo y Europa Oriental, aunque el rey no aceptó entrar en la alianza.Finalmente fue elegido papa Clemente VII; durante su papado, en 1526 le fue concedida la administración de Riez, aunque las protestas del rey francés por haber sido nombrado sin su aquiescencia motivaron que al año siguiente renunciara la diócesis en favor de François de Dinteville, sobrino del condestable Anne de Montmorency.Enfermo y cansado, se retiró a Ancona, donde murió al año siguiente; sus restos fueron trasladados a Roma y sepultados en la Basílica de Santa María en Aracoeli.