Cristo de la Humildad y Paciencia (Las Palmas de Gran Canaria)

Por eso querían encargar una nueva al máximo exponente de la escultura barroca en Canarias, José Luján Pérez, el encargo fue aceptado sólo parcialmente, porque el escultor guíense reconoce la gran calidad de la obra que se pretendía quitar del culto, respetó la cabeza y modeló el cuerpo del Cristo.Para que la efigie del Cristo no procesionara sola Luján Pérez hizo en 1804 la imagen de san Pedro Penitente,[1]​ también talló un san Juan Evangelista para que acompañara al Señor.El Cristo de la Humildad y Paciencia salía antiguamente el Lunes Santo[1]​ hasta que en 1978, empezó a salir el Viernes Santo en la procesión magna interparroquial.Hasta 1961 inexplicablemente el Nazareno y el apóstol Pedro salían separados, cuando el artífice de Guía concibió y realizó a san Pedro Penitente, postrado de rodillas, con las manos entrelazadas y la mirada dirigida hacia lo alto, para que formara un grupo escultórico con el Señor de la Humildad y Paciencia.En ese año, al producirse la exclaustración de las religiosas y el derribo del monacato, pasó a la parroquia de San Francisco.