Al mismo tiempo el rendimiento de sus bonos a largo plazo se elevó por encima del 12%.
[7] Por su parte, a mediados del mismo mes, la prensa chipriota se hizo eco de rumores en la dirección de una petición formal por parte del Gobierno.
[9][10] El día 26 el portavoz del gobierno de Chipre, Stefanos Stefanou, afirmó que su país había solicitado oficialmente ayuda financiera a la Unión Europea para sanear su sistema bancario.
[21][22] El gobierno chipriota negoció con Europa estas primeras condiciones, particularmente adversas, que se vieron parcialmente flexibilizadas.
[41] De cara a la anunciada apertura del jueves 28, un portavoz del Banco Central anunció que el Gobierno de Chipre limitaba a 300 euros la cantidad de dinero en efectivo disponible para los ciudadanos en bancos y cajeros, lo que, en la práctica suponía extender el corralito para los fondos en metálico.
Posteriormente se afirmó que el rescate pactado no iba a ser suficiente, estimándose la necesidad real en unos 20.000 millones de euros.