La zona de la República de Chipre bajo el control del gobierno tiene una economía de mercado dominada por el sector de servicios, que equivale a 4/5 del PIB.
Los sectores de turismo, gestión financiera y patrimonial son los más importantes.
La variación de las tasas de crecimiento durante la década pasada reflejan la dependencia económica del turismo, actividad cuya rentabilidad varía debido a la inestabilidad política de la región y las condiciones económicas de la Europa Occidental.
Un agresivo programa de austeridad en años anteriores permitió la adopción de la moneda única, y ayudó a reducir un déficit de 6,3% el 2003 para un superávit de 1,2% el 2008, y reducir la inflación a 4,7% al año.
[1] El 26 de junio de 2012, el gobierno de Chipre pidió ayuda financiera a la Unión Europea para sanear su sistema bancario, conocida popularmente como rescate.