Coronación de Pío III

La escena, como muchos del ciclo dedicado a Pío II en la Biblioteca, se establece en dos registros, con una simetría sustancial de las partes.

Por los costados se aprecian músicos, mientras que en el centro de la logia aparece la inscripción conmemorativa.

En cualquier caso, la falta de retratos para comparar hace difícil cualquier hipótesis; sólo el chico en el extremo derecho, con una media luna en el calcetín, confirma ser pariente de Piccolomini, pero se desconoce su identidad.

[1]​ La escena se caracteriza por una cierta rigidez en la división en partes, por lo que parece tener aún reminiscencias del Quattrocento.

En cualquier caso, la personalidad artística del maestro de Urbino tuvo que sacudir las certidumbres del ya maduro Pinturicchio, empujándolo hacia una renovación, en años siguientes, de los trabajos en la Biblioteca Piccolomini.