Contrición (religión)

Es arrepentimiento, dolor, pena ante el pecado cometido por la misma ofensa hecha a Dios.Los contricionistas, Alejandro de Hales (1186-1245), Miguel Bayo (1513-1570) y posteriormente los autores jansenistas.[5]​ La atrición no son sentimientos perfectos, pero si aptos para orientar al espíritu contra el mal.Este es un temor que aproxima al arrepentimiento y dispone a la conversión, creyéndolo la Iglesia como un medio para lograr la reconciliación sacramental.La atrición considera el pecado una ofensa a Dios y no una falta, considera la fealdad del pecado en sí mismo, también el temor al infierno y al castigo (Denzinger 898).La teología estudia el acto de contrición en dos vías, la del rechazo del pecado y la reorientación de la propia vida a Dios, implicando adhesión a la salvación donada por Cristo y experimentada por la Iglesia.
San Pedro en un acto de contrición. 1823-1825. Goya