Condrita

[4]​ Se diferencian de los meteoritos metálicos por su composición pobre en hierro (Fe) y níquel (Ni).

Números mayores implican el aumento de metamorfismo térmico, hasta llegar a 7, donde el cóndrulo se ha destruido.

[10]​ Según su composición y su tipo petrológico se distinguen los siguientes tipos: También llamadas «condritas E.» Exceptuando las recogidas en la Antártida y las recolectadas por la National Weather Association (NWA), solo se han encontrado veinticuatro.

El hierro que contiene no se encuentra formando óxidos, sino sulfuros o como metal.

En 1962, en una carta publicada en la revista Science por Leslie C. Edie, se aludía a la posibilidad de que los aminoácidos y compuestos orgánicos de estas condritas hubieran sido depositados en ellas por una civilización extraterrestre, para que fueran encontrados por otra especie inteligente.

Suelen estar muy oxidados, dándoles una apariencia rojiza, y presentar olivino rico en Fe.

Casi todo el metal que contienen está oxidado o formando parte de sulfuros.

Contienen menos cóndrulos que las condritas E, y parecen proceder del regolito de un asteroide.

Posiblemente el agua percolaría al ser el asteroide bastante poroso, como ocurre en los acuíferos terrestres, por lo que no formaría ríos ni lagos.

Estas condiciones pueden presentar analogías con los eventos que originaron la vida en la Tierra.

Condrita NWA 869 .
Recreación de un disco protoplanetario , donde las partículas de polvo y granos chocan, y por acreción forman planetas o asteroides. Imagen de la NASA .
Cóndrulos de la condrita Bjurböle .
Cóndrulos de la condrita Grassland .
Condrita de enstatita (EH5) Saint Sauveur.
Condrita ordinaria LL6.
Condrita carbonácea CV3 que cayó en México en 1969, de 520 g.
Estructura general de un aminoácido