Más tarde, se empezaron a tintar los fotogramas con colores uniformes, también para darles un determinado efecto.
La pionera de la verdadera introducción del color en el cine fue Technicolor, una compañía fundada en 1915, que no tuvo demasiado éxito en sus primeros años.
Gracias a él se podían insertar algunas secuencias de color en películas en blanco y negro.
La primera vez que se proyectó un film completo en color fue en 1929, y fue la película On with the show.
Con el tiempo, esta empresa dejó de producir películas, y Eastman Kodak llegó a superar la intensidad del color en sus impresiones durante los años 70.
Las primeras películas en color se proyectaron en el teatro Palace-Variété de Londres en 1909, gracias al sistema cinemacolor inventado por George A. Smith.
No obstante, el primer largometraje rodado con este sistema fue Becky Sharp (película) de Rouben Mamulian, estrenada en 1935.
Combinando el metraje original y estos filtros en un proyector especial, consiguieron obtener un resultado en color.