El deporte del coleo de toros deriva del coleo, la faena ganadera que consiste en derribar un toro o res, a caballo o a pie, jalandolo de la cola.
[1] En México, se practica en la Charrería, otro derivado de la faena del coleo conocido como colas en el lienzo o coleadero pero con otras reglas y normas.
En respuesta ante las quejas de los soldados —en lo que hoy es Baja California Sur— que supuestamente se veían obligados también a ejercer el oficio de Vaquero, Venegas arremete, diciendo:[3] Otra referencia antigua sobre el coleo a caballo en América fue escrita en 1765 por Pedro Tamarón Romeral, obispo de Durango, el cual criticó y prohibió la práctica del coleo y toreo por los sacerdotes:[4] El Padre fray Alonso Ponce en 1586 durante un viaje que hizo a la ciudad de Guadalajara nos da una descripción de un coleo a pie.
[5] En la obra —Rusticatio Mexicana (1782)— el sacerdote jesuita Rafael Landivar, describió en verso épico, la faena del coleo en los campos del México dieciochesco:[6] En La Española, en lo que hoy es Haití y República Dominicana, también se llegó a practicar esta faena ganadera, aunque hoy en día ya no, esto según Antonio Sánchez Valverde al describir la ganadería en aquella isla en su libro “ Idea del valor de la isla Española” (1785):[7]
No existían reglamentos ni autoridad que legislase las “coleadas”.
Anteriormente, se les llamaba fiestas llaneras, hoy en día son torneos deportivos en los que su reglamento, más allá de indicar técnicas y condiciones, indica que la música llanera debe sonar durante el turno de coleo en forma obligatoria.
[12] El proceso de organizar y reglamentar el coleo en Venezuela como disciplina deportiva tuvo varios enfoques, unos veían que era un deporte y otros lo consideraban una faena de llano simplemente.
La primera asociación de coleo es fundada en 1941, en San Felipe, Yaracuy.
En esa época a los mejores coleadores se los premiaba en las ferias con copas o trofeos, tal como a los ganaderos en las exhibiciones y juzgamiento o evaluación del ganado.
Hubo especial interés en incluir el coleo como disciplina y eso significaba la creación de la Federación venezolana de Coleo, junto a otras, béisbol, tenis, fútbol, atletismo, lucha, boxeo, que ya existían.
Al grito de “cacho en la manga” indica que el toro está en la pista, se inicia la competencia.
Remolino: Es equivalente a tres campanas y es con la que se obtiene el mayor puntaje: 30 puntos en primera zona y 25 puntos en la segunda zona.
Existen varias categorías y la variable principal para su clasificación es la edad del coleador.