Colegio de San Felipe y Santiago

Entre los confundadores del colegio se encuentra una mujer, Antonia Dávila que era sobrina de Fernando Solier.El edificio se ha mejorado y se compró la huerta de S. Christoual para la recreación de los Nuestros, y según la buena diligencia del Rector, quedarán con menos deudas que tenían.Cinco años después se comenzó la construcción de una iglesia definitiva que acabaría siendo consagrada en 1606.El edificio del colegio, en su ubicación definitiva, contó con una importante iglesia que hoy se conserva.En su calle central en la parte media se encuentra un amplio tabernáculo de madera, sobre el que se dispone un óleo representando el Martirio de San Felipe que corona el retablo.Al oeste del templo se disponía el edificio del colegio propiamente dicho, alrededor de un patio cuadrado con elegantes fachadas de piedra caliza.
Interior del templo del colegio, hacia su retablo mayor.
Patio del colegio.