Limita con los municipios de Guadix, Albuñán, Jérez del Marquesado y Lugros.
No obstante, sus orígenes son mucho más antiguos: se sitúan en el Bajo Imperio Romano, época de la que han aparecido numerosas monedas y joyas.
Otros historiadores defienden la tesis de que este asentamiento romano se estableció sobre otro anterior del periodo argárico, siempre en torno a sus yacimientos de hierro y cobre.
Los Reyes Católicos tras conquistarla, la cedieron al marqués de Villena y bajo esa jurisdicción llegó hasta el siglo XIX cuando se suprimieron los señoríos.
En la entrada del pueblo hay una cruz en memoria de aquellos que perecieron en la Guerra Civil.