Abadía de Claraval

De hecho, las necesidades de la vida monacal se perciben en la arquitectura, que contiene agrupados en torno al claustro edificios dedicados a la vida de los monjes y hermanos legos, edificios comunes (molinos, cocinas, etc.) y la zona dedicada a la oración.

La abadía fue reconstruida en 1700, conservándose el dormitorio de los legos que había sido utilizado como granero hasta la fecha.

De entre los otros edificios abiertos al gran público cabe destacar el claustro, edificado en el siglo XVIII con estilo clásico.

Tras la bancarrota de la misma fue recomprado por el Estado y destinado a prisión en 1808.

Este hecho es relativamente frecuente durante el siglo XIX tras las reformas del código penal; otras abadías fueron reconvertidas en su momento en prisiones (como la del monte Saint-Michel o la de Fontevrault) debido a la utilidad que presentaban al efecto sus anchos muros.