Caza

La especie humana ha practicado la caza desde la prehistoria, era la primera y principal ocupación de los hombres.[3]​ El humano comenzó a cazar para subsistir, y así sigue siendo actualmente en muchas partes del mundo.Platón llamaba a la caza «ejercicio divino» y la escuela de las virtudes militares.Leemos en Homero que Ulises fue herido en el muslo por un jabalí cuya señal le duró toda la vida.Tenían una cierta vanagloria en poseer perros bien enseñados a los que les daban nombres diferentes, distinguiéndolos según el país de donde provenían.Pompeyo, vencedor en las regiones africanas, se entregó entre estos pueblos a los placeres de la caza.La ley Sálica contenía ya algunos reglamentos relativos a la caza, pero no coartaba en nada el derecho natural de esta.Por ejemplo, en España se considera caza mayor a las especies que en estado adulto son más grandes que un zorro (sin incluirlo): jabalí, ciervo, corzo, cabra montés, rebeco, lobo (al norte del río Duero), gamo, muflón y arruí.[4]​ Aunque en caza menor también es necesario tener en cuenta las características meteorológicas (viento, lluvia, fases lunares, temperatura, etc.) es en la mayor donde hay que tenerla más en cuenta, ya que estas características condicionan los movimientos de los animales, o delatan la presencia del cazador.En la variante más conocida, practicada en casi toda la península, los cazadores (denominados monteros) se colocan en puestos rodeando una mancha (zona de monte más o menos espeso donde se refugian los animales) dispuestos en líneas (denominadas armadas) que rodean la mancha.La aproximación se realiza en el medio natural del animal, siendo comúnmente en cumbres, laderas escarpadas o montes cerrados.Aunque las definiciones de «al salto» y «en mano» difieren poco, en realidad la ejecución es muy diferente.Caza similar al «aguardo» o «espera» en mayor, salvo que aquí los cazadores principalmente esperan a los animales en el trayecto de sus dormideros a las zonas de comida, o sus pasos migratorios.Caza realizada sobre mamíferos de madriguera (zorros y conejos) utilizando perros terrier o hurones.A continuación se levanta al animal de la cama o refugio utilizado.[6]​ En 2019 Colombia también prohíbe la caza deportiva, siendo así el segundo país en Latinoamérica en declararla ilegal.Organizaciones como WWF[11]​ han reconocido que la caza de trofeos —donde está científicamente entendida como una dinámica poblacional y está gestionada correctamente— ha demostrado que es una herramienta efectiva de conservación en algunos países y para algunas especies, incluidas especies en peligro.En un reciente artículo científico[13]​ han tratado de elaborar un resumen de lo que supone la caza deportiva a nivel mundial y han destacado que «la caza recreativa puede desviar la tierra del desarrollo agrícola beneficiando a ecosistemas enteros».
Cazador con rifle, en Inglaterra.
Caza en la Antigua Grecia.
Caza del jabalí en un mosaico romano.
Cuadro representando al cazador con su presa, pintado por Joachim von Sandrart .
Azulejos representando la caza.
«Notas de caza, un alto en la sierra» ( Blanco y Negro , 1900).
Caza del alce en Noruega , imagen de comienzos de siglo XX.
Caza con mochuelo y red .
Pintura de la caza de la liebre con galgo.
El hurón es utilizado en la caza del conejo en madrigueras.
Primer libro publicado en español sobre la caza (Pedro Núñez de Avendaño, 1543).
Primer libro publicado en español sobre la caza (Pedro Núñez de Avendaño, 1543).