Estos fenómenos ocurren con cierto solapamiento temporal y pueden ser divididos para su estudio en las siguientes fases: inflamatoria, proliferativa, y de remodelación (algunos autores consideran que la cicatrización ocurre en cuatro o más etapas, si se subdividen las fases inflamatoria o de proliferación en pasos intermedios).Algunos factores que pueden contribuir a este problema son la diabetes, enfermedades de las venas o arterias, edad avanzada, e infecciones.[10] Las plaquetas también producen glicoproteínas en sus membranas celulares que les permiten adherirse unas a otras, formando una masa.[2] Inmediatamente después de que resulte dañado un vaso sanguíneo, las membranas celulares dañadas liberan factores inflamatorios tales como tromboxanos y prostaglandinas, éstos hacen que el vaso se contraiga minimizando la pérdida de sangre y ayudando a que se aglutinen en el área las células inflamatorias y los factores inflamatorios.[15][16] También limpian la herida mediante la secreción de proteasas que rompen el tejido dañado.Una vez que han completado su tarea los granulocitos sufren un proceso de apóptosis y son devorados, degradados por los macrófagos.[17] Otros leucocitos que se encuentran en la zona son células T ayudantes, que secretan citoquinas para inducir la subdivisión de las células T, aumentar la inflamación, mejorar la vasodilatación y permeabilidad de los vasos.Sin embargo, si la inflamación se prolonga durante mucho tiempo puede producir daño a los tejidos.[24] En un medio ambiente con bajo contenido de oxígeno, los macrófagos y plaquetas producen factores angiogénicos que atraen la células endoteliales mediante quimiotaxis.[15] Por lo tanto, cuando el tejido es perfundido en forma adecuada, se reduce la migración y proliferación de células endoteliales.Eventualmente aquellos vasos sanguíneos que ya no se precisan mueren mediante apoptosis.Cuando la fase inflamatoria está finalizando su número alcanza un máximo entre una a dos semanas después de producida la herida.[14] Hacia el final de la primera semana los fibroblastos son las células que se presentan con mayor abundancia en la citatriz.[2] Los fibroblastos que se encuentran en el tejido normal migran hacia la zona de la herida desde sus márgenes.Inicialmente los fibroblastos utilizan el fibrina scab formado en la fase inflamatoria para migrar, adhiriéndose a la fibronectina.[26] Los fibroblastos depositan inicialmente sustancia basal en la base de la herida y posteriormente colágeno, al cual se pueden adherir para migrar.[26] Sus principales componentes son fibronectina y hialuronano, los cuales crean una matriz altamente hidratada que facilita la migración de las células.Los fibroblastos depositan moléculas ECM como ser glicoproteínas, glicosaminoglicanos (GAGs), proteoglicanos, elastina, y fibronectina, que después utilizan para migrar a través de la herida (Cohen, 2005).Los fibroblastos también secretan factores de crecimiento que atraen células epiteliales hacia la cicatriz.[28] Aun cuando los fibroblastos producen nuevo colágeno, las colagenasas y otros factores lo degradan.Gradualmente termina la granulación y la cantidad de fibroblastos en la herida disminuye una vez que han cumplido con su misión.[2] La creación de tejido granular en una herida abierta permite que se desarrolle la fase de reepitelialización, durante la cual las células epiteliales migran a través del nuevo tejido para crear una barrera entre la herida y el medio ambiente.[30] Cuanto más rápido se produzca esta migración, tanto menor será la cicatriz que quede.[29][32] Las células epiteliales poseen la habilidad de fagocitar residuos tales como tejido muerto y material bacteriano que si no obstruirían su paso.Las células solo pueden migrar sobre tejido vivo por lo que deben secretar colagenasas y proteasas tales como metaloproteinasas matriciales (MMPs) para disolver las zonas dañadas del ECM que se encuentran en su camino, particularmente en la zona del frente de la placa migratoria.[29][32] Los queratinocitos también disuelven la membrana basal utilizano el nuevo ECM depositado por los fibroblastos para desplazarse.[20] Al terminar su migración, los queratinocitos secretan las proteínas que forman la nueva membrana basal.[26] La contracción puede durar varias semanas y continúa aún después que la herida se ha reepitelializado por completo.[31][2] Si la contracción continúa por demasiado tiempo, puede producir desfiguración y pérdida de función.[40] Posteriormente, los fibroblastos, que han sido estimulados por factores de crecimiento, se diferencian en miofibroblastos.
Comparación del proceso inflamatorio luego de 3 semanas