Plantada en el año 1300, es la finca vinícola más antigua de Burdeos, habiendo recolectado su 700.º cosecha en 2006.[1] Fue un regalo a Bertrand de Goth al ser nombrado arzobispo de Burdeos, realizado por su hermano,[2] Berald.[3] Recibió su nombre del que adoptó Bertrand al ser nombrado papa, Clemente V; al ser elegido en 1306 dio la finca a su sucesor como arzobispo, cardenal Arnaud de Canteloup.[4] Bertrand, quien más tarde trasladaría el papado a Aviñón cerca de Châteauneuf-du-Pape, plantó este viñedo original con uvas tintas.[5] El viñedo siguió siendo propiedad del arzobispado de Burdeos hasta la Revolución francesa, cuando fue nacionalizado y vendido como un bien national.