A mediados del siglo XIX, el lugar, por entonces con ayuntamiento propio, contaba con una población censada de 298 habitantes.
A la entrada del pueblo se encuentra la Fuente Vieja, donde apenas casi sale agua proveniente del antiguo manantial que subsistía Cereceda.
Cereceda tiene una biblioteca en la planta alta del ayuntamiento que se encuentra en la plaza de la Iglesia.
En la ladera de la montaña se encuentra el cementerio y la ermita de San Roque, restaurada en 2014 ya que estaba en ruinas desde 1925, y que data del siglo XVI.
[5] En la cima, presidiendo la montaña, la cruz de Cereceda, a la que es posible su acceso por dos caminos.