Cenobio de Florencia

A la muerte de Dámaso, regresó a su ciudad natal, donde reanudó sus labores apostólicas, y tras la muerte del obispo de esa sede, Cenobio fue designado para sucederlo con gran alegría del pueblo.Sobre este relicario se sitúa la pintura La Última Cena de Giovanni Balducci.Su madre, viuda, lloraba cuando llevó el niño muerto al diácono de Cenobio.Por medio de una oración, San Cenobio revivió al niño y lo devolvió a su madre.En las paredes del Palazzo Vecchio se conservan frescos pintados por Domenico Ghirlandaio en 1482.