Cementerio simbólico
Un cementerio simbólico es un lugar destinado a conmemorar la memoria de personas que se presume su fallecimiento, debido a su desaparición y por ende, la ausencia de su cadáver.A diferencia de un cenotafio o más conocido como «tumba vacía», que suele ser erigido a modo de monumento conmemorativo o mausoleo en un espacio público, un cementerio simbólico es literalmente un camposanto en su composición, con tumbas individuales para recordar a cada difunto.[2] Las tumbas, que se encuentran todas vacías, son en su estructura idénticas a cualquier cementerio local, aunque en términos prácticos, al no existir un muerto en su interior, cumple una función similar a la de una animita.En algunos casos, la creación de una de estas tumbas viene asociada a uná velación previa simbólica, donde se incluyen fotografías o las pertenencias de la persona presuntamente fallecida, con un posterior «funeral simbólico», donde sus deudos pueden realizar esta ceremonia como parte de su duelo, siguiendo sus propias tradiciones locales y religiosas, tal como si se tratara de un entierro a una persona real.En la actualidad, existe registro de catorce cementerios simbólicos, entre los que destacan: