Sin embargo, desde 1868 el control pasó a ser administrado exclusivamente por el ayuntamiento.Durante la Guerra Civil, Zaragoza cayó desde el inicio en el bando franquista y se produjo una fuerte represión hacia los republicanos.Se produjeron numerosos fusilamientos en las tapias del cementerio y los cuerpos fueron, posteriormente, enterrados en fosas comunes (exhumadas en 1980).Frente a la fosa común del cementerio se erige este monumento de José Bueno Gimeno.Es una escultura de 1898 en piedra caliza que representa a un Ángel rezando con un rosario en la mano.Constituye una de las más antiguas representaciones escultóricas del cementerio.[5] En el panteón de Antonio Morón Lázaro se halla esta escultura alegórica del silencio.La escultura representa una joven con el dedo índice sobre su boca, pidiendo silencio.