Está consagrada a San Olaf, el santo patrono de Noruega.La construcción fue realizada en ladrillo, siguiendo el modelo neogótico, muy presente en Noruega en ese tiempo.Su sobria fachada occidental se extiende en una única torre terminada en aguja.Su interior contiene tres naves, divididas entre sí por columnas de granito.Un ábside en el extremo oriental sirve de presbiterio, donde se encuentra el altar.