La frontera oeste penetra dentro de Aragón y viene marcada por las interferencias lingüísticas con las hablas del aragonés: los ríos Ésera e Isábena, que son el límite natural para la parte del norte.
Hacia el sur partiendo de Tamarite de Litera la delimitación entre las lenguas es clara y pasa por Zaidín, Fraga, Maella, Valjunquera y Aiguaviva.
En cuanto a la frontera meridional, las isoglosas señalan el paso hacia las hablas valencianas y se extienden hacia el sur formando una extensa área de transición donde confluyen características noroccidentales y meridionales, que llega hasta tierras de la Plana de Castellón.
Otros rasgos ocupan un área más reducida, a menudo con carácter de arcaísmo: El léxico oferece algunos tipos lexicales o valores semánticos diferenciales respecto al oriental: espi l (mirall, espejo), melic (llombrígol, ombligo), xic (noi, niño), corder (xai, cordero), romer (romaní, romero), catxap (conillet, gazapo), sangartalla (sargantana, lagartija), pegar (encomanar), voler (estimar)... A menudo se encuentran en valenciano y, además, presentan paralelismos con el léxico castellano y aragonés.
Al sur de los Puertos de Morella las características se van haciendo cada vez más meridionales, respondiendo cada vez más al valenciano típico.