Se desconoce la fecha en la que fue construida aunque considerando la presencia de una barbacana, elemento constructivo introducido en la península ibérica por los almorávides, puede situarse a principios del siglo XII.
Las torres se caracterizan por la sobriedad de líneas, fabricadas en tapial y mampostería.
Tiene en la actualidad 10 metros de altura y una entrada desde el exterior cuya función se desconoce.
Adosadas a la muralla en los lados de mayor longitud dos pequeñas torres macizas hoy prácticamente desaparecidas servirían de refuerzo para la construcción y posiblemente definieran la estructura acodad que permitía la entrada a la fortificación.
Poseía un sótano hoy colmatado por los derrumbes del techado que actuaría como almacén.