El castillo fue la residencia principal de la familia Visconti y fue destruido por la efímera República Ambrosiana Dorada que los derrocó en 1447.
En 1450, Francisco I Sforza, una vez que venció a los republicanos, comenzó la reconstrucción del castillo para convertirlo en su residencia.
En 1494 Ludovico Sforza se convirtió en señor de Milán y llamó a numerosos artistas para decorar el castillo.
En los años siguientes, sin embargo, el castillo fue dañado por ataques de tropas italianas, francesas y alemanas.
Sin embargo, el rey Francisco I de Francia siguió en Milán y sus soldados colocaron minas bajo los cimientos del mismo, con lo cual los defensores se rindieron.
Cuando Francisco II Sforza retomó brevemente al poder en Milán, restauró y amplió la fortaleza, que en parte fue adaptada como residencia para su esposa, Cristina de Dinamarca.
Puerta del Socorro Y. Navillo Z. Casas de la ciudad El complejo Castillo incluye algunos museos y alberga importantes colecciones[6] En 2012 se han descubierto en el castillo docenas de bocetos y pinturas atribuibles a Michelangelo Merisi, conocido como Caravaggio.