Este documental fue realizado por personas afines a los condenados y con la participación de estos.
[3] El edificio, situado en la calle Baja de San Pedro (en catalán: Sant Pere més Baix) de Barcelona, estaba habitado por unos okupas desde el año 2000 y ese día se hacía una fiesta ilegal.
[3] Esta versión, según la cual se le había lanzado una maceta desde un balcón, fue inicialmente explicada por el entonces alcalde Joan Clos.
[2] En 2011 nació una plataforma, con el nombre de Des-montaje 4F, que pretende «desmontar la versión oficial» del caso 4F.
[12] En 2022 el Tribunal Supremo redujo la condena de 20 a 18 años y medio al no considerar probado que Lanza actuara por motivos ideológicos.