Carvacrol, o cimofenol, C6H3CH3(OH)(C3H7), es un fenol monoterpenoide.
Tiene sabor picante y produce el aroma del orégano.
[4] El carvacrol inhibe el crecimiento de diversas cepas de bacterias por ejemplo Escherichia coli[5] y Bacillus cereus.
Se utiliza de aditivo alimentario para prevenir la contaminación bacteriana.
[6] Daña la membrana celular e inhibe la proliferación de Pseudomonas aeruginosa.