Mucho me temo que este hombre no se encuentre en Italia, de todos modos es muy extraño.
En Gigi, Pietro me dio un libro, que venia en un sobre abierto, de Rosa Chacel: “La sinrazón”, dedicado.
(Urmeneta) Envíe el libro de Ungaretti a Tomás Segovia.
Lo que todavía no he podido hacer es llevar a la Sra.
Recogí todo lo que Ud, dejó en el hotel Auriga, en aquella misma mañana.
Johanna quiso despertarme a las 8.30 para que viera el eclipse de sol, y casi no lo logró.
Enrique Rivas, se presentó un día en casa, con la buena nueva de que lo han aceptado en la F.A.O.!
Como tiene que ocupar el puesto en abril, hasta entonces, se fue a Alemania para aprender alemán.
Me dijo que quería escribirle desde allí y le di la dirección de Urmeneta.
Anteayer hice un arroz (creo, tan bueno como el último que ud.
Me alegra mucho saber que irá o estará ya en Murcia.