Carlos de Borja y Centellas

Entre 1669 y 1679 estudió en el Colegio Mayor de San Ildefonso de la Universidad de Alcalá, en la cual se doctoró en Derecho civil y canónico.

Habiendo sido destinado desde niño a la carrera eclesiástica, como sacerdote recibió numerosos beneficios: fue canónigo de la catedral de Toledo y arcediano de Madrid, vicelimosnero mayor del rey Carlos II, prior del monasterio de Santa María del Sar en Santiago de Compostela, abad de Alcalá la Real y de Santa Leocadia de Toledo.

Durante la Guerra de Sucesión fue nombrado por el papa Clemente XI vicario general de todos los ejércitos del rey de España y arzobispo titular de Trebisonda.

Fue elevado al patriarcado de las Indias Occidentales en 1708 y creado cardenal en 1720 con el título de Santa Pudenciana.

Fue el primer gran alto cargo eclesiástico, que promovió la devoción de la Virgen de las Maravillas recién llegada a Cehegín en 1725 por toda España, promulgando cien días de indulgencia a quien le rezara una salve.