Sus características originales lo hacen diferente a los reactores nucleares de agua presurizada convencionales (PWR), que han estado en operación en las cuatro últimas décadas.
[4] El concepto CAREM fue presentado por primera vez en 1984 en Lima, durante una conferencia del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) sobre reactores de pequeño y mediano tamaño.
El acuerdo responde a un interés global creciente en los pequeños reactores modulares y sus diversas aplicaciones.
Se construyó un circuito de alta presión y convección natural para conocer detalles termohidráulicos y verificar que la convección natural puede imponerse, ensayándose además los mecanismos hidráulicos de control.
Las ventajas técnicas y económicas que se obtienen en el diseño Carem respecto del tradicional son las siguientes: Es un núcleo con baja pérdida de carga y puede apagarse en menos de un minuto.
Es un reactor barato debido a la simplicidad en su funcionamiento y por poseer combustible nuclear de alto quemado.
Posee ya competidores, que si bien están algunas etapas atrás en desarrollo, vienen avanzando con rapidez.
[2] El CAREM comercial será basado en el prototipo CAREM 25 utilizando las lecciones aprendidas de su desarrollo y estará basado en la idea de una construcción modular y puesta en marca por etapas.
Este sería realizado en una construcción por etapas y con una optimización del diseño de seguridad en relación con el prototipo CAREM25.