Capilla de Nuestra Señora de Jerusalén

Lagrange y un grupo numeroso de frailes dominicos representaban a l'École Biblique.

A lo largo de los años sucesivos la iglesia se iría decorando con abundantes frescos y mosaicos.

Al término de la guerra el edificio, y la capilla en particular, quedaron en un estado ruinoso.

Tras algunas reparaciones urgentes, poco después de la guerra la capilla volvería a retomar sus funciones religiosas.

A causa de las diversas vicisitudes que había sufrido el edificio, tanto los mosaicos como el recubrimiento de estuco habían sido gravemente dañados.

Por lo demás, la capilla se adapta a las necesidades de la liturgia reformada según el Concilio Vaticano II, eliminando el altar adosado a la pared en el ábside, y creando un nuevo altar mayor exento utilizando los dos altares laterales.

[6]​ En el 11 de mayo de 2009 Benedicto XVI, en el marco de su visita apostólica a Tierra Santa, visita Notre Dame of Jerusalem Center[7]​ y dona para la capilla el sagrario que se encuentra en la actualidad, reemplazando el sagrario que se había instalado cuando se reformó la capilla en la década de los 70.

Deposición de la primera piedra
Estado de las obras a finales del año 1893. El P. Gérmer Durand, A.A., arquitecto de la iglesia, se encuentra en medio de las obras, junto al ábside.
La Iglesia recién bendecida en noviembre de 1894