Camarista fue el nombre que recibió un cargo desaparecido de la corte española.
[2][3] El cargo apareció con este nombre en el siglo XVIII.
[4]Avanzado este siglo el número de camaristas superó el previsto oficialmente.
[9] El cargo era ejercido por mujeres solteras y estaba destinado a la reina[8] y otras mujeres de la familia real.
[6] En el momento de contraer matrimonio, solían ser dotadas por el monarca español.