Durante sus estudios, realizó un cursillo práctico en un auditorio de París donde le presentaron a François Reichenbach, quien le pidió en 1977 que compusiera la música para su documental México mágico.
Su nombre se encuentra a menudo en las películas para televisión de Gérard Marx y Laurent Heynemann.
También compuso las bandas sonoras para las películas Le petit prince a dit de Christine Pascal y Le fils du requin de Agnès Merlet, en 1992 y 1993 respectivamente.
[6][7] Tras producir la banda sonora de Winged Migration en 2001, Coulais anunció que quería reducir significativamente sus contribuciones a la música cinematográfica y concentrarse en otros proyectos, como la creación de una ópera para niños.
Sin embargo, en 2002 aportó la música de la película animada L'enfant qui voulait être un ours y dos años después compuso la banda sonora de la exitosa película Les Choristes de Christophe Barratier, llevándolo a ganar un nuevo Premio César.