Las brujas acusadas vivían en el área en torno a Pendle Hill en Lancashire, un condado que, a fines del siglo XVII, era considerado por las autoridades como una región salvaje y sin ley: un área «legendaria por sus robos, violencia y laxitud sexual, donde la Iglesia era honrada sin mayor entendimiento de sus doctrinas por la gente común».
Cuando la media hermana de María, Isabel llegó al trono en 1558, los sacerdotes católicos tuvieron que pasar nuevamente a la clandestinidad, pero en zonas remotas como Pendle continuaron celebrando misas en secreto.
[8] Quizás fue difícil para los jueces encargados de escuchar las pruebas —Sir James Altham y Sir Edward Bromley— entender la actitud del rey Jacobo hacia la brujería.
[13] No queda claro si Device quería comprárselos (como declaró) y Law se negó a desarmar su carga para una pequeña transacción o si Device no tenía dinero y estaba mendigándolos (como sostuvo Abraham, el hijo de Law); sin embargo, pocos minutos después de su encuentro, Law sufrió una apoplejía de la cual culpó a Device.
[14] Al parecer, Alizon estaba convencida de sus propios poderes, pues, cuando Abraham Law la llevó a visitar a su padre pocos días después del incidente, Device habría confesado y pedido perdón.
Elizabeth estuvo más reticente y admitió únicamente que su madre, Demdike, tenía una marca en el cuerpo, algo que muchos, incluido Noweel, consideraban haber sido dejado por el Diablo tras haber chupado su sangre.
La harina fue entregada anualmente hasta el año previo a la muerte de John y, en su lecho de muerte, este sostuvo que su enfermedad había sido causada por Chattox debido a que no había pagado por protección.
Tanto Demdike como Chattox estaban ciegas para entonces (contaban con más de ochenta años) y ambas proporcionaron confesiones perjudiciales.
"[20] Si bien Anne Redferne no hizo ninguna confesión, Demdike afirmó que la había visto haciendo figuras de arcilla.
Como resultado de la investigación, otras ocho personas fueron acusadas de brujería y llevadas a juicio: Elizabeth Device, James Device, Alice Nutter, Katherine Hewitt, John Bulcock, Jane Bulcock, Alice Gray y Jennet Preston.
[29] Jennet Preston vivía en Gisburn, en Yorkshire, por lo que fue enviada al Assize de York para ser juzgada.
Preston fue acusada de asesinar a Thomas Lister con brujería, cargo al cual se declaró no culpable.
Ya había comparecido ante Bromley en 1611, acusada de asesinar a un niño con brujería, pero fue hallada inocente.
[32] Los demás acusados vivían en Lancashire, por lo que fueron enviados al Assize de Lancaster para ser juzgados.
El testigo principal contra Device fue su hija, Jennet, quien tenía unos nueve años de edad.
[37] James Device se declaró inocente de los asesinatos con brujería de Anne Townley y John Duckworth; sin embargo, tanto él como Chattox habían hecho una confesión previa ante Nowell, la cual fue leída en la corte.
Los testigos fueron llamados a declarar que Anne era una bruja «más peligrosa que su madre»;[43] sin embargo, Anne se negó a admitir su culpa al final y no presentó evidencia alguna contra los otros acusados.
[47] Alice Nutter, viuda de un yeoman terrateniente, parecía diferente a los demás acusados al ser comparativamente más rica.
[49] Katherine Hewitt (alias Mould-Heeles) fue acusada y encontrada culpable por el asesinato de Anne Foulds.
[52] Alice Gray fue acusada junto con Katherine Hewitt por el asesinato de Anne Foulds.
[53] A diferencia de los demás acusados, Alizon fue confrontada en la corte por su presunta víctima: John Law.
Al parecer, Device habría creído genuinamente ser culpable, pues cuando Law fue llevado a la corte, Alizon cayó de rodillas y confesó entre sollozos.