Bonanada

Pedro III pedía a su hijo que valorara como, Bonanada, desde Valencia, podría haber asesinado a Juana de Valois en Francia, y añadía "que si esto fuera cierto, no habría rey ni gran señor en el mundo que no estuviera muerto".

Habiendo sido liberada, su reputación quedó restablecida y continuó su tarea como matrona.

En la Edad Media, la medicina se practicaba fuera de la regulación profesional hasta pasado el siglo XIV.

Esta regulación afectó sobre todo a las mujeres que hasta entonces habían trabajado en la medicina atendiendo las enfermedades, partos, curas y realizando tratamientos, pues eran las que conocían las propiedades de diferentes plantas y remedios medicinales, siendo estos unos saberes ancestrales que se habían transmitido oralmente entre las mujeres de generación en generación.

En el contexto social en el cual vivía Bonanada, la figura de la matrona era relevante porque eran las mujeres las que podían atender a otras mujeres, y así mantener la intimidad de los cuerpos femeninos.