En esta ciudad además abrió una Academia de Comercio, introduciendo en la misma el euskera, algo inusual entonces.
Afiliado al Partido Nacionalista Vasco participó en las reuniones preparatorias del mismo ya en tiempos de la Segunda República Española.
Preparó un texto para la enseñanza en las escuelas en vasco (ikastolak) de un gran éxito: Sabin euskalduna, que tradujo al euskera Juan Agustín Zumalabe.
Visitó al octogenario Arturo Campión, ya ciego, poco antes de ser tomada la ciudad.
En Chile recibieron ayuda gracias al apoyo a la República del Presidente Pedro Aguirre Cerda, oriundo vasco.
En 1941 comienza a publicar Estornés la revista Batasuna, para los vascos de Chile, posteriormente sustituida en 1943 por una más política, Euzkadi, en la que también colabora.
[2] En 1958, la familia Estornés-Zubizarreta, con Mariano Estornés, embarca con destino a Europa y se instala en San Sebastián donde reanuda la relación con los amigos que quedan.
Recuperó material importante de la editorial anterior a la guerra, que habían guardado sus amigos, familiares y el propio portero del inmueble.
En ese mismo año comienza a publicar la Colección Auñamendi, y bajo la cobertura de Itxaropena hasta 1962.