La obra debía tener personajes de tamaño natural y se encargó al renombrado artista Gert Hödl.
[3] En 2002 la escultura se derrumbó antes de abrirse al público y tuvo que ser salvada por Gert Hödl con un trabajo nocturno.
En 2003 Graz fue la Capital Europea de la Cultura, el hielo mostró una tonalidad verdosa por primera vez y para garantizar una mayor durabilidad se utilizaron bloques más grandes; aumentando el peso a 45 toneladas.
Un político local del Partido Verde señaló con cinismo:«Debido al calentamiento global, el Adviento será cada vez más templado.
[10] Finalmente, la asociación de turistas rechazó las sugerencias para cancelar el proyecto y argumentó que la escultura convirtió al Adviento de Graz en un evento inconfundible y económicamente importante.